Predicción desde el rencor:

Maldigo tus labios indecisos, Qué no se apiadan entre tácticas. Maldigo esa apatía al alejarte, Maldigo tu indescriptible sabor Que ninguna otra fuente réplica. Maldito sea quien ose besarte. Aquel atrevido esclavo de tu esencia Que su condena ha pactado; Al tacto entre identidades inversas. Maldito está de tí, igual que yo. Maldito sea tu cuerpo que me atrae Y en las noches me somete Convirtiéndome en una parte suya A la audaz luz de la luna Convertida en cómplice por tí. Maldito sea el que en tu piel se pierda; En ese conjunto de sedas y estrellas Que envuelve a soñadores sin descanso; Les arranca los sueños y en un suspiro De su piel emergen miles de alaridos. Maldito sea tu canto, sirena atroz. Entre notas tú presa ingresa Y de el Do al Mi su vida pierde. Entre los acordes de tu celestial camino. La cabeza se le cae ante tus pies; Y allí le devorás, en el acto inhumano. Te maldigo como la tierra al cielo, Igual que las estrellas al sol. Te maldigo como fiel pecador  De tus labios, de el paraíso que poseen. Te maldigo como tenue deseo banal.   ~ A. Serna